CARIÑOGRAMA

C A R I Ñ O G R A M A

Técnica para entrenar la socialización positiva desarrollando habilidades emocionales de autoconocimiento y expresión emocional.

¿Qué mejor para subir la autoestima que recibir muestras de cariño? Pues esto justamente es lo que nos propone esta estupenda actividad, en la que los peques tendrán que dejar mensajes de cariño y amistad a sus compañeros de clase.

Es sencillo de preparar y lo hemos realizado en el taller del amor con papiroflexia en el día de Carnaval. Con un folio hicimos nuestras cajitas, en las que los peques escribieron su nombre, nos quedó una por alumno en el mural. Finalmente con letras de colores pusimos el nombre y lo decoramos con corazones.

Lo único que nos queda ahora es ponernos a trabajar con él, el alumnado dedicará cada día un ratito para escribir un mensaje de amistad, de cariño, de agradecimiento por algo que hizo, de disculpa, etc.y se lo dejarán en la caja del amigo/a a quien se lo quieren dedicar. También pueden dejar regalitos en forma de dibujos o algún pequeño obsequio. 

Es una muestra de cariño hacia los que comparten muchas cosas con nosotros, trabajando de esta manera con los peques la empatía, el cariño, la amistad, para hacerlos conscientes de la importancia de las emociones positivas y los beneficios que nos traen. Trabajamos la felicitación, el agradecimiento y el pedir disculpas. Además de ser de mucha utilidad para favorecer en el grupo la socialización y el surgimiento de actitudes positivas como la amabilidad y los elogios. Por otro lado, es una manera sencilla de favorecer que se animen a escribir en un contexto significativo.

Haciendo de una actividad tan sencilla un trabajo de aprendizaje en equipo entre alumnado, familias y equipo docente.

En la asamblea de clase recordamos y compartimos los mensajes recibidos y cómo lo vivimos, incluso aprovechamos el momento de leer nuestros mensajes para fomentar el diálogo, el buen humor y el respeto por los demás, además de trabajar otros aspectos como la lectoescritura (necesaria para escribir y leer los mensajes), los números (podemos aprovechar para contar los mensajes que hay en el cariñograma), la expresión verbal (al fomentar el diálogo), etc.

 Para niños que aún no escriben, pueden realizar dibujos y que sea en la familia donde, con la ayuda del adulto, escriba lo que quiere transmitir.