Lo elegimos antes de irnos de vacaciones de Navidad.
Poco a poco hemos traído cositas que nos van a permitir estudiar los números.
Para empezar hemos visto los números que hay en nuestro cuerpo: talla, peso, número de pie...; luego en nuestra vida: número de teléfono, de casa, portal, piso, fecha de nacimiento...; a nuestro alrededor: en la clase, por parejas, con un metro fuimos midiendo diferentes objetos (o a nosotros mismos!) y lo anotamos en un papel, cada pareja acordaba de antemano qué cosas iba a medir.
Hicimos lo mismo pero pesando diferentes objetos de la clase. Pero antes elaboramos teorías acerca de qué iba a pesar más y qué menos.
Encontramos números en un tickets de la compra, en billetes de tren, de avión, entradas de cine y de teatro... aprendiendo un poco qué nos decían y para qué servian tanto números: asiento, fila, cantidad de productos comprados, precios, códigos de barras...
Nos hicimos nuestros propios carnets de identidad...
Un lugar donde nos dimos cuenta que también se necesitaban números es en la ELABORACIÓN DE RECETAS. Queríamos hacer espaguettis... y Noemí no podía enseñarnos a hacer... porque no es cocinera... así que llamamos a unos verdaderos profesionales que con delantal y buena maña nos realizaron un taller de fabricar espaguettis... pero de verdad y DE COLORINES!!!
Vinieron Patricia, mamá de Yaiza, cocinera, acompañada de su pinche de cocina Laura, mamá de Julia, y también Iván, papá de Yaiza y gran cocinero.
Nosotros en clase ya habíamos buscado la receta, mirado y estudiado cada ingrediente y visto algún vídeo en internet sobre cómo hacer pasta... qué fácil parecía!!!
Ayyy amigos... pero es más laborioso de lo que parece!!!
La masa la elaboramos rapidillo... nos entretuvimos más ( y también disfrutamos más) porque la sorpresa que nos preparó Patricia era que la íbamos a hacer de colorines... amarillo (colorante), negro (con sepia de calamar), verde (con espinaca), roja (con tomate) y rosa (con remolacha).
OS DEBO UNAS FOTOS DE CÓMO QUEDARON LOS ESPAQUETTIS...
Noemí nos dijo que ella no sabría hacerlo... así que pensamos en Victor, el papá de Elsa que es un experto en números, matemáticas e inventos varios!
Encantado nos vino a explicar cómo funcionan los relojes de sol y nos ayudó a hacer uno!
En cuanto estuvo terminado, salimos al patio a ver si funcionaba...y...
FUNCIONA!!!, buscamos la latitud y el sitio idóneo para ponerlo y "voilá!" nuestro reloj marcaba la hora en la que estábamos... bueno, con un pequeño desfase de algún minutillo...pero ya nos explicó Victor porqué era.
Emocionados luego dibujamos nuestros propios relojes con tiza en el patio.
Mientras duraron las marcas que nos hizo Victor en el suelo salimos a comprobar las horas... bueno claro... los días que hacía sol, que también comprobamos que los días nublados estos relojes no nos sirven!.
Nos enseño a hacer unos insectos superfáciles y además con LIMPIAPIPAS!!! un elemento que queríamos usar en algo desde hace tiempo!!!
Tuvimos que contar cuántas patas poníamos en cada uno.
Y aunque el que hicimos nos lo llevamos de imán para la nevera de nuestra casa, nos dejó unos cuantos para trabajar en clase comparativamente el número de patas que tienen si era > ó < que el de otro insecto.
Al final del trimestre llevamos a casa nuestro dossier y les contamos a nuestras familias todo lo que aprendimos de los números... y bueno... seguimos aprendiendo... porque esto no ha hecho más que empezar...
que ahora sumar y restar, multiplicar y hasta dividir es nuestro objetivo!!!
Gracias a todos por ayudarnos a aprender y comprender tantas cosas de nuestro pequeño-gran mundo!!!
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